Tapetes para yoga: Muchas escuelas de Yoga ofrecen un tapete para sus alumnos. Si es tu primera clase, ok, esto será una estupenda estancia más agradable, pero si quieres recorrer este camino y convertirse en un experto en Yoga, invierta en tener su propio tapete para yoga.
Tener tu propio tapete es importante para practicar. Permite que ese sea su espacio, su pedazo de introversión y autoconocimiento. Que está siempre al alcance para mantener la disciplina y la rutina de la práctica en casa o de viaje.
Previene también la contaminación indeseable de las bacterias, los hongos y el sudor de otros estudiantes. También puede ser recordatorio, incluso colgado en un rincón de la sala, donde solo verlo puede recordar ideas, enseñanzas o conocimientos recibidos en el aula, de modo que el Yoga está siempre presente en la vida diaria.
Cuando abro mi tapete es un momento especial, es como una magia y nada es más importante que hacerlo como un ritual, cuando tu estás inspirado y tienes las ganas de estar realizando Yoga, tienes todas las ganas del mundo y sobre todo, aprender en cualquier parte y momento del día, y recordar las clases de Yoga.
Como elegir un buen tapete
1 – Conoce tu necesidad
Quieres un tapete más grueso para no sentir tus articulaciones en el suelo, quieres un tapete que absorba el sudor y no se corrugue o quieres un tapete más ligero; para llevarlo de un lado para el otro y sentir más estabilidad
Es importante que sepas antes de invertir todas las cualidades del tapete que que vas a escoger.
2 – Conocimiento del material
Tienes que escoger el tapete y su material, cada material será para un fin, un tapete de lona y telas hermosas, será siempre para tu habitación y tienes que cuidarlo, en cambio, un tapete de PVC puedes utilizarlo casi en cualquier parte.